
365 días que me regalaron para verte cada día, para disfrutarte y sentirte a plenitud. Pero las cosas entre tú y yo no comenzaron bien. Fuiste un conjunto de circunstancias aderezadas con alegrías, sinsabores, tropiezos y aciertos. Me diste poco, pero no me quitaste nada valioso. Menos mal.
Con todo y eso, no te reprocho nada, al contrario. Te agradezco ya que por ti hoy tengo más experiencias que contar y puedo escribir nuevas páginas en mi vida.
Gracias 2010, porque con tus luces y sombras me has hecho crecer y soñar con un 2011 mejor. Gracias por mantener viva la llama de la esperanza, por mantenerme de pie luchando contra las adversidades.
Lamento decirte que esta relación entre tú y yo ha terminado, que doy por terminado estos amores porque mi 2011 promete ser mejor que tú y se que tanto a mi como a los míos nos traerá muchas bendiciones por la gracia de Dios.
A pocas horas de que hagas tus maletas y te vayas definitivamente te digo adiós sin resentimientos ni pesares sólo deseándote que te vaya bien.
0 comentarios:
Publicar un comentario